Una cualidad importante de Gilmore Girls es la manera en la que retrata a los personajes femeninos. Acá exploramos si estos están relacionados con ideales feministas.
Hay series que trascienden generaciones, barreras de idioma y de cultura. Ya sea por sus icónicos diálogos, sus elaborados personajes, o sus asombrosas escenografías, estas son series cuyo éxito se extiende en el tiempo. Este es el caso de Gilmore Girls; serie estadounidense que se lanzó en el 2000. Gilmore Girls, como lo dice su nombre, es una serie que trata de mujeres. Se cuenta la historia de Lorelai, madre soltera que quedó embarazada a los 16 años, y su hija Rory a lo largo de los años. La serie cuenta con 153 episodios, y en el transcurso de sus 7 temporadas tuvo un éxito importante alcanzando hasta 5,2 millones de espectadores. Pocos años después de su lanzamiento, la serie empezó a ser emitida en más de 25 países, entre los cuales se encuentran Alemania, Brasil, Francia, Irlanda, Portugal, Italia, entre muchos otros. El éxito de esta serie estadounidense se ha mantenido a lo largo de los años, tanto, que en el 2016 se estrenó una miniserie de 4 capítulos que trata sobre la vida de los personajes nueve años después, titulada “Gilmore Girls: A Year In The Life”.
El semejante éxito de la serie se puede deber a muchas cosas. Desde sus primeras temporadas, se ha elogiado el trabajo de Amy Sherman-Palladino –creadora, directora, productora y escritora de la serie– principalmente por su estilo distintivo de los diálogos, caracterizados por ser rápidos y sarcásticos. También se ha reconocido la calidez que transmite la serie, ya sea por la familiaridad de los personajes o por el pintoresco pueblo (“Stars Hollow”) en el que toma lugar la historia. La serie emana un sentimiento de refugio y “confort”. Como se afirmó en el periódico San Francisco Chronicle: “es una visualización intergeneracional, cálida y brillante; es un espectáculo fantástico”.
Sin embargo, una de las cualidades más valiosas de la serie es la manera en la que retrata a los personajes femeninos. Lo hace de una manera muy innovadora para su época, pues el desarrollo de estos personajes y muchas de las escenas de la serie transmiten, sutilmente, ideas feministas.
Gilmore Girls trata de la vida de Lorelai junto con su hija Rory. Lorelai es hija de Richard y Emily Gilmore, una familia muy adinerada, pero ella lo deja todo atrás cuando queda en embarazo y se empeña en empezar una vida nueva. La serie muestra la cotidianidad en este hogar de madre e hija, siguiendo sus dinámicas y problemas; como los altibajos en el trabajo de Lorelai, la decisión de universidad de Rory, las peleas entre las dos, y sus experiencias amorosas. A pesar de ser ellas las principales protagonistas, la serie está llena de personajes femeninos importantes, cuyas decisiones y desarrollo en general son muestra de ideales feministas.
Lorelai: valentía e independencia
Lorelai es probablemente el personaje más innovador y, en ciertos aspectos, revolucionario de la serie. Es una mujer que, a pesar de crecer con todas las comodidades económicas que le ofrecía su familia, nunca se sintió parte de ese “mundo” –en el que debía ir a bailes, presentaciones en sociedad y vestir elegante–. Cuando quedó embarazada y tomó la controversial decisión de no casarse, esto causó conflicto con sus padres por lo que decidió irse de casa en busca de una nueva vida.
Lorelai llega a un pueblo desconocido, sola, sin trabajo ni apoyo económico, y se abre camino por su cuenta. Empezó trabajando como una empleada de servicio en un hotel, y con el paso de los años fue ascendiendo hasta que se convirtió en gerente ejecutiva, y después de un tiempo creó junto con su mejor amiga su propio hotel. Además, cuando ya estaba un poco más establecida decidió terminar sus estudios universitarios, y obtuvo su título en negocios. Todo mientras criaba por su cuenta a Rory.
Lorelai es un retrato de las madres solteras que se enfrentan al reto de sacar adelante a sus hijos. Es un personaje que desafía la idea de que las mujeres, especialmente si son madres, deben casarse y contar con el apoyo de un esposo para tener un hogar y una vida plena.
Rory: convicción y confianza
Rory es la definición del “golden child”, creció siempre con la idea y las expectativas de que era perfecta en todo; académicamente brillante, noble, y querida por todos en el pueblo. Aunque esto la convierte en un personaje complejo y que ha sido constantemente criticado, es importante reconocer que varias de sus decisiones transmiten ideas relevantes sobre su rol como mujer dentro de la sociedad.
Gran parte de estas decisiones giran en torno a sus relaciones amorosas, específicamente sobre cómo prioriza sus sueños y sentimientos en estas. Esto se ve desde la primera temporada, en la que Rory se niega a decirle “te amo” a Dean –su primer novio y con quien entabla una relación importante–. ¿Por qué hacerlo, si no lo sentía?
Otro ejemplo, mucho más contundente, es cuando rechaza la propuesta de matrimonio de Logan para encontrar por cuenta propia su lugar en el mundo: “hay muchas cosas en mi vida que en este momento no están resueltas (…) me gusta la idea de que todas las posibilidades están abiertas, y si me casara contigo simplemente no lo estarían”. Estas decisiones muestran que Rory toma las riendas de sus relaciones y en estas prioriza sus emociones y su desarrollo personal, lo que la convierte en un referente de una mujer decidida y confiada.
Paris: real y perseverante
Paris, compañera y amiga de Rory, es uno de los personajes con ideales más feministas de la serie. Sin miedo a expresar lo que piensa, hay muchas escenas en las que cuestiona y critica los pensamientos tradicionales sobre las mujeres: “somos mujeres, así que solo podríamos estar discutiendo por un hombre, ¿verdad?”. Además, es evidente en el transcurso de la serie cómo este personaje afronta las dificultades, siempre con sus objetivos y sueños muy claros.
Desde el momento en el que no fue aceptada en Harvard (su universidad soñada) hasta cuando no pudo continuar siendo la editora de Yale Daily News, Paris siempre tuvo muy claros sus objetivos y nunca se dió por vencida para trabajar para conseguirlos. Es un personaje muy real, no es retratada como perfecta, de hecho es una persona ansiosa y con dificultad para socializar. Pero esto hace que la audiencia se identifique más con ella; una mujer con problemas reales, pero que siempre lucha para conseguir lo que se propone.
Lane: ambición y curiosidad
Lane es la mejor amiga de Rory. Creció con una mamá muy estricta, pero esto no impidió su libre desarrollo de personalidad. A pesar de que en muchas ocasiones su familia le intentaba imponer sus gustos y sus ideales (muy religiosos y con los que Lane nunca se sintió identificada), este personaje nunca se conformó, sino que siempre buscaba encontrar su propia personalidad. Fue así como creó una banda de rock, y fue construyendo su vida basada en sus propios ideales, y no en los que su familia intentaba imponerle.
Emily: fortaleza y carácter
Emily es la madre de Lorelai y la matriarca de la familia. A pesar de tener ideales un poco más conservadores, por ejemplo, en cuanto a que en un hogar es esencial la presencia de un hombre (por lo que siempre quiso que Lorelai se casara), su rol dentro de la familia es muy importante y desafía ideas tradicionales. Siempre a cargo de tomar las decisiones, nunca se quedaba callada y expresaba sus pensamientos. En la familia Gilmore, era ella la que estaba a cargo.
Feminismo en los 2000
La serie se empezó a transmitir en el año 2000, por lo que en ese momento no era tan común ni tan relevante expresar ideas feministas dentro del cine. Durante esa misma época se estrenaron series como Sex And The City y Dawson´s Creek que también hicieron un intento para incorporar ideas feministas. En Sex And The City se celebran las amistades femeninas y se muestran a las protagonistas como mujeres fuertes, ingeniosas, exitosas y sexualmente liberadas. Sin embargo, la trama principal es cómo estas mujeres consiguen pareja, lo cual es un poco contradictorio. En Dawson´s Creek hay personajes, como Jen Linley, que también refleja la imagen de una mujer confiada y fuerte; sin embargo su sexualidad era tratada como algo despectivo y negativo. Las series que ahora son consideradas feministas – como Unorthodox, Creedme, Podría Destruirte – son muy recientes.
No obstante, Amy Sherman-Palladino, creadora y directora de Gilmore Girls, creó un mundo lleno de mujeres líderes, fuertes, perseverantes y empoderadas. Claro, la serie tiene escenas que contradicen un poco estos ideales; pero en su mayoría, el desarrollo de los personajes femeninos de Gilmore Girls son muestra de un feminismo sutil y relevante para la época. Esta es una serie cuya principal audiencia son mujeres jóvenes y adolescentes que hasta ahora están encontrando su lugar en el mundo. Así, ellas pueden ver a los personajes de la serie como modelos a seguir, lo que les muestra cómo su rol dentro de la sociedad podría ser. De esta manera, el estar expuestas a estas imágenes de mujeres fuertes e independientes, les puede ayudar a visualizarse de la misma manera. En dicho sentido, Gilmore Girls puede hacer que las mujeres no solo se sientan identificadas, sino que también se proyecten con valores y cualidades similares a las de estos icónicos personajes.